
A pesar de contados momentos, nada habituales, de cierta lucidez, su apoyo a Martín Villa y esta entrevista demuestran lo que ya sabíamos de Zapatero, que es el mismo tipo de mierdaseca que González, Aznar y Rajoy. Lo siento, el artículo que enlazo es muy desagradable.
Esta entrevista me revuelve las tripas porque no sé si «el miedo pesó», pero sí se reconocer a un cobarde que intenta reescribir la «memoria histórica de la propia memoria histórica» con frases como: «Hasta el año 2000 no había ninguna iniciativa parlamentaria en torno a la memoria. Son los nietos en gran medidas los que lo impulsan. Es un factor generacional».
Sí, yo soy de otra generación, pero sé, por ejemplo, que en la transición murieron 600 personas por razones de origen político, y solo lo pagaron personas muy concretas. Conozco las lagunas de la ley del olvido, y también he crecido bajo la perspectiva de la sombra de unas palabras determinantes de Martín Villa: «lo nuestro son errores, lo otro son crímenes». Sí, es una cuestión generacional, cuestión de la mierda política generada por un genocidio franquista que dejó todo atado y bien atado. Muy generacional, sin duda.